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Regatas le volvió a ganar a San Martín y está al frente
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Jueves, 25 de octubre de 2018
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 El Fantasma, con otra soberbia actuación de Giordano, se adueñó de nuevo del clásico con un contundente 102-83 y se puso 1-0. El sábado, la revancha en el Fortín Rojinegro.
Regatas Corrientes confirmó el envión y anoche no le tuvo piedad a su clásico rival San Martín para superarlo por un claro 102 a 83, para ponerse al frente 1-0 en la serie, al mejor de tres, del repechaje del Super-20 de la Liga Nacional de Básquetbol (LNB). Nuevamente, la figura del clásico fue el juvenil campeón olímpico, Marco Giordano, con 22 puntos (5/6 en simples, 1/1 en dobles, y 5/7 en triples), que apareció en los momentos calientes del match; en tanto que por el lado de su rival sobresalió el escolta Tomás Zanzottera, también con 22.
Con una estupenda efectividad de tres puntos (dos de Juan Pablo Arengo, dos de Anthony Smith y uno de Javier Saiz), Regatas comenzó a mandar en el juego y en el marcador hasta llegar a tomar una diferencia de once puntos, 17 a 6, a los cuatro minutos y fracción. Tras el minuto del DT rojinegro, Sebastián González, el encuentro se equilibró, con el mexicano Irwin Ávalos Bonilla y Lee Roberts aportando en ofensiva para la visita, pero fue solo hasta que Paolo Quinteros y Fabián Ramírez Barrios, un triple cada uno, calibraron la mira y Regatas terminó ganando el primer cuarto por 27 a 15.
En el inicio del segundo parcial, Ramírez Barrios clavó otro triple y dejó el marcador en 30 a 15. Pero después el partido se equilibró y la diferencia osciló en diez puntos. En San Martín apareció Zanzottera y en Regatas Quinteros. Sin embargo, a dos minutos del final, una artillería de Arengo (dos triples consecutivos) dejó el score en 53 a 35 (+18) en el mejor momento del Remero, para luego cerrar el primer tiempo en 58 a 42.
Tras el descanso largo, comenzó otro partido. San Martín ajustó la defensa y de la mano de Zanzottera comenzó a limar la diferencia, aunque Tayavek Gallizzi se encargó, en el otro costado, de mantener la ilusión fantasma, que rápidamente se derrumbó con un Pablo Orlietti determinante en el juego, hasta dejar el marcador 71 a 70 a falta de un minuto para el cierre del cuarto. En el peor momento del local, un triple de Giordano y un rebote ofensivo y gol de Ramírez Barrios decoró el marcador en 76 a 70.
La magia de Giordano apareció en el último capítulo. El base juvenil campeón olímpico, con dos triples gravitantes (uno desde Júpiter), le dio tranquilidad y aire al Fantasma, que se alejó en el marcador 88 a 75, a los cuatro minutos. Fue, sin dudas, el punto de inflexión de un partido que parecía que se cerraba con marcada paridad, pero que Regatas lo supo sobrellevar apoyado en un nuevo triple de Giordano para cerrar el clásico, el primer chico, en 102 a 83.
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