|
Acusado admitió la relación pero dijo que no la mató
Martes, 5 de diciembre de 2017
|
|
Para la querella fue un crimen planificado. El detenido hizo un relato nuevo de lo ocurrido en enero de 2016. Declararon tres testigos.
En el Tribunal Oral Penal Nº1 se desarrolló la primera audiencia por el crimen de la joven Tamara Yaquelin Zalazar de 19 años, encontrada muerta en una alcantarilla sobre Ruta 5, cerca de Lomas de González. El crimen de la muchacha sucedió en enero de 2016, por el cual un profesor de filosofía, Raúl Alberto Escalante, está en el banquillo de los acusados. El sospechoso declaró 1 hora 40 minutos. Brindó un nuevo relato porque “en el momento de su detención no quería perder a su familia, su casa y su trabajo”. Aseguró que no la mató pero admitió que tenía una relación sentimental con la jovencita. Poco después de las 8 comenzó la audiencia en la cual Raúl Alberto Escalante está sindicado como autor material del “Homicidio calificado mediando violencia de género” en el que perdiera la vida Tamara Y. Zalazar. Ante el Tribunal, Escalante decidió “contar su verdad de los hechos”, un relato distinto al realizado en el momento de su detención en febrero de 2016.
“Conté de una manera por temor a perder mi familia, mi casa y mi trabajo”, dijo al comenzar su declaración. En un extenso relato dejó de manifiesto que conoció a “Yaque” (como la llamaba), por medio de una red social. “Ella me envió solicitud de amistad y la acepté. Empezamos una rara relación. No recuerdo si ella me dio su número o fui yo, pero los mensajes que nos mandábamos eran eróticos. Yo no estaba acostumbrado a eso, pero me prendí en el juego. Ella sabía que tenía familia e hijos”, dijo. En parte de su testimonio contó que el 12 de enero ella le pidió para verse y que era ese encuentro el primero que tenían. “Acordamos un lugar y subió al auto. Fuimos a un motel. Ella sabía que debía viajar hacia Paraje Tacuaral y fue entonces que me pidió que la acercara a un cumpleaños en el Paraje 89”. Contó Escalante que justo en el acceso al paraje estaba estacionado un auto rojo por un desperfecto mecánico con tres ocupantes, quienes resultaron ser conocidos de la jovencita. Allí la habría dejado a Tamara. Y después no supo nada más de ella hasta cuatro días después que la Brigada lo buscó por supuesta vinculación a la muerte de la chica. “Lo de Escalante fue un crimen planificado. Fue poco creíble su relato nuevo. En un momento dijo que perdió su teléfono celular cuando escapaba de la Policía en medio del campo y después quiso poner como prueba un supuesto video del encuentro que tuvo con Tamara”, afirmó Hermindo González desde la querella. Como testigos se presentaron ante el Tribunal sus padres y la ex suegra de la muchacha. Los tres coincidieron en que Tamara era una buena madre y que no estaría mucho tiempo lejos de su hijo de dos años. A su familia le había dicho que tenía que cobrar una plata por un trabajo y que volvería. De su casa ubicada en el barrio San Marcos salió a las 12:30 y al no regresar, los padres realizaron la denuncia de desaparición. “Cuando llegamos a la comisaría el 13 de enero con la foto de ella, la Policía me dijo que habían encontrado un cuerpo y que tenía que ir a la morgue para saber si era mi hija”, dijo entre lágrimas María, mamá de Tamara. El debate continuará el lunes 11 a las 8.
|
|
|
|
|