La carrera para suceder a Colombi comenzó con más dudas que certezas

Lunes, 2 de enero de 2017

En el inicio del nuevo año, aún son inciertos los tiempos del cronograma que culminará en las urnas. Ni el oficialismo ni la oposición todavía tienen el nombre de quien encabezará su fórmula gubernamental.

Sin confirmaciones y con muchas conjeturas. Así comenzó el derrotero electoral en 2017 en una provincia que concurrirá a las urnas par elegir a su próximo Gobernador, el sucesor de Ricardo Colombi, nada más y nada menos que quien más tiempo estuvo (está) sentado en “el sillón de Ferré” en la muy rica historia correntina.
Por ahora hay pocos datos concretos. ¿Cuándo se realizarán las elecciones a Gobernador? ¿Las elecciones provinciales serán desdobladas? ¿Se votará a Gobernador en una fecha y en otra diferente para legisladores provinciales? ¿Algunos de los comicios coincidirá con las elecciones para cargos legislativos nacionales?
Pero estas pocas definiciones también van de la mano de las candidaturas. En el frente gobernante, desde el partido más importante de “ECO -Cambiemos”, la Unión Cívica Radical (UCR), lo único en lo que todos los “correligionarios” coincidieron es que será un hombre de esa fuerza quien encabezará esa alianza. Pero qué nombre será el que encabece la fórmula, por ahora es un misterio.
En la UCR, las especulaciones por la candidatura a Gobernador son varias. Por un lado, están quienes pugnan por el diputado nacional Gustavo Valdés. Otros aseguran que será el ministro de Planificación Eduardo “Peteco” Vischi. Hay quienes señalan al presidente del radicalismo correntino, el senador Sergio Flinta. Y también no son pocos los que opinan que no hay que descartar al ministro Secretario General de la Gobernación, Carlos Vignolo.
Y la lucha interna en la UCR es dura. Más cuando el propio presidente Mauricio Macri confirmó, en la nota brindada a época el 12 de diciembre pasado, que el PRO no pugnará por encabezar la fórmula y que es el gobernador Colombi quien más preparado está para resolver el dilema del nombre.
Y tras esta declaración de Macri, en las huestes del PRO correntino vieron desvanecerse las últimas y pequeñas esperanzas de un apoyo presidencial que pudiera forzar la conformación de la fórmula gubernamental con un hombre o mujer de esa fila encabezándola. Quizá quien más aspiraba a ese respaldo que pudiera torcer la voluntad de los radicales de liderar la boleta (algo, ciertamente, casi improbable) era la actual Gerente de Vialidad Regional, Ingrid Jetter.
Otros que dentro de la alianza oficialista no esconden sus deseos de ser candidato a Gobernador son el actual vice de Colombi, Gustavo Canteros (Proyecto Corrientes) y el presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Cassani (Encuentro en Libertad – ELI) Pero claro, deberán sortear la barrera impuesta por los radicales.
El Partido Justicialista (PJ) encabeza el principal sector opositor (no se puede decir que será el Frente para la Victoria – FPV – porque el nombre de esa alianza quedó “desgastado” tras la caída de Daniel Scioli ante Macri en las presidenciales y su cercanía a un kirchnerismo hoy muy vinculado a no pocas investigaciones judiciales por millonarios actos de corrupción). En claro tienen que las elecciones internas peronistas serán el 19 de marzo y de que el senador nacional Carlos “Camau” Espínola intentará, por segunda vez, luchar por llegar a la Gobernación.
En pleno reacomodamiento del justicialismo nacional, tras el cimbronazo de la pérdida de la presidencia, Espínola se mostró rápidamente alejado del kirchnerismo y junto a Sergio Massa. ¿Esto no le jugará en contra de los sectores que todavía se mantienen firmes a la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner? Ya lo dijo “Camau”: “Seré candidato a Gobernador. Si es por el peronismo, mejor”.
El intendente de Capital, Fabián Ríos, todavía no definió si le plantará batalla a Espínola en las internas del PJ o si “acomodarán las calchas” y buscará su reelección para conducir el principal municipio de Corrientes.
Por lo pronto, el 2017 comenzó a caminar. Las definiciones políticas quizá no se tomen vacaciones.