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10 curiosidades de la boda real de Harry y Meghan Markle
Lunes, 21 de mayo de 2018
La boda del año ya pasó. El príncipe Harry y la actriz Meghan Markle se casaron el sábado, en el casamiento más esperado y comentado de este 2018. Aquí, algunas curiosidades de ese día (y del día después).

1

La llegada al altar

Mucho se habló en la previa de la boda de la emergencia de protocolo que desató la enfermedad del padre de Meghan, internado por sus problemas cardíacos tras el escándalo de las fotos arregladas con un paparazzi. Pero las diferencias familiares de los Markle (incluidas las críticas a la princesa de sus hermanastros) no opacaron su gran día. Meghan llegó a la capilla de St. George en un auto acompañada por su madre, Dorian, quien lució un piercing de brillante y un fascinator que cubría sus prolijos dreadlocks. Entró sola a la iglesia, acompañada por dos pajes, y en la mitad de la nave la encontró su suegro, el príncipe Carlos, que la escoltó hasta el altar. "Estás espectacular", le dijo Harry cuando la vio.


2

El cortejo

Los nenes del cortejo siempre le dan un toque de ternura a una boda. Y esta no fue la excepción. Diez nenes formaron parte del cortejo nupcial, entre los que estaban, por supuesto, los hijos mayores de William, George (el futuro rey) y Charlotte. Harry eligió a otros tres pajes y damas de honor, todos hijos o hijas de familias aristocráticas de quienes es padrino. Meghan eligió a dos hermanas, Remi y Rylan Litt, de 6 y 7 años, y a los tres hijos (una nena y dos nenes) de Jessica Mulroney, una de sus mejores amigas, esposa de un productor televisivo canadiense y nuera del ex premier de Ottawa, Brian Mulroney.


3

Una princesa comprometida

En sus votos matrimoniales, Meghan rechazó rendirle obediencia a su esposo. "Yo, Meghan, te tomo a ti, Enrique, como mi marido, para tenerte y sostenerte, a partir de hoy en adelante; en lo bueno y en lo malo; en la riqueza y en la pobreza; en la salud y en la enfermedad, para amarte y cuidarte, hasta que la muerte nos separe, de acuerdo con la ley sagrada de Dios. En la presencia de Dios hago estos votos", expresó la actriz. Tampoco habían hecho votos de obediencia su suegra, Lady Di, ni su cuñada, Kate Middleton. El perfil de Meghan en la página oficial de la Casa Real, que se publicó luego de la boda, la muestra como una activista por los más desprotegidos, recordando viajes que Markle hizo a Ruanda y a la India. Pero no menciona su pasado como actriz.



4

Un coro gospel

Fue uno de los momentos más destacados de la ceremonia. El coro gospel que interpretó "Stand by me" le dio el tono perfecto a una ceremonia descontracturada como nunca se vio en una boda de la realeza. El obispo negro estadounidense Michael Curry, quien concelebró el oficio religioso, había conmovido antes con su sermón sobre el amor en el que citó a Martin Luther King.


5

Los vestidos

Al igual que su cuñada, Kate Middleton, Meghan lució un vestido para la ceremonia religiosa y la recepción en el castillo de Windsor, y otro para la fiesta privada en la residencia de Frogmore House. El primero, diseñado por Clare Waight Keller, directora artística de Givenchy, fue un sobrio y elegante vestido que simbolizó toda la historia y el estilo de la casa francesa que vistió a figuras icónicas como Audrey Hepburn. El segundo más descontracturado, llevó la firma de Stella McCartney, hija de Paul y una de las diseñadoras británicas del momento. El príncipe Harry también cambió su look: traje militar oficial para la ceremonia, traje negro para la fiesta.



6

El auto

Los protagonistas de la boda real británica dejaron el castillo de Windsor en un Jaguar E-Type Concept Zero, una readaptación eléctrica de última generación al clásico que la marca lanzó al mercado en 1968 y con el que causó una verdadera sensación en todo el mundo. La patente del auto incluía la fecha de la boda: E190518.


7

Los looks de las invitadas

Sin royalties entre los invitados, los celebrities atrajeron toda la atención. Todas las mujeres cumplieron con la regla de los fascinators, esos sombreros tan comunes en los eventos de la alta sociedad británica que son en algunos casos súper extravagantes.



8

El cambio de Oprah

La conductora estadounidense Oprah Winfrey contó en su cuenta de Instagram que cambió de vestido un día antes del casamiento. "El viernes a la mañana me di cuenta de que el vestido beige que iba a usar para la ceremonia real iba a quedar demasiado blanco para las fotos", contó la conductora. Entonces, le pidió a la diseñadora Stella McCartney (sí, la hija de Paul, la misma que hizo el segundo vestido de Meghan) "trabajó toda la noche para tener su vestido terminado, porque tuvimos el vestido-gate. Color equivocado, ahora tenemos el color correcto. Creo que lo hicimos bien", aseguró.

9

Las zapatillas de Serena

Como la novia, su amiga Serena Williams también cambió de outfit para la segunda fiesta. Primero se puso un Versace rosa y, después, un Valentino estampado. Pero el detalle no estuvo en el vestido, sino en sus pies: en un video en su cuenta de Instagram mostró que llevaba zapatillas. Para bailar sin problemas.


10

Los souvenires

La Casa Real entregó una bolsa con souvenires reales a los más de 2.000 invitados que siguieron el casamiento en las pantallas gigantes de los jardines del castillo. Este lunes, algunos de esos souvenires ya se estaban subastando por eBay. En Inglaterra también estaban liquidando por estas horas el merchandising oficial de la boda, que incluyó desde porcelana hasta preservativos


     
 
 

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